Mientras muchas marcas siguen apostando por los
crossovers y dejando de fabricar monovolúmenes compactos, parece que las marcas
alemanas premium piensan lo contrario, al punto de que BMW dejó atrás su
tradición y decidió fabricar en 2014 su primer vehículo con tracción delantera,
el cual fue el Serie 2 Active Tourer que ahora llega a su segunda generación.
Se fabrica en la planta alemana de Leipzig y presenta un diseño más estilizado,
un excelente espacio y mucha practicidad, motores turbocargados a gasolina y
diésel, así como un buen equipamiento.
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Foto: BMW |
Al igual que varios vehículos actuales de la
marca, adopta una controvertida parrilla en forma de riñonera más grande,
acompañada de faros alargados con luces diurnas LED en forma de L. En las
variantes Luxury Line el paragolpes tiene entradas de aire laterales más
delgadas, mientras que en el paquete M Sport son más grandes y están
acompañadas de rejillas falsas.
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Foto: BMW |
En los laterales el paral A está más inclinado
para mejorar el coeficiente aerodinámico. Las ventanas ahora tienen un diseño
un poco más estilizado y bordes cromados. Los guardafangos traseros han sido
ligeramente ensanchados para darle algo más de musculatura al vehículo y hay
líneas de carácter ascendentes. Las puertas incorporan manijas enrasadas con la
carrocería.
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Foto: BMW |
En la parte trasera los stops son más delgados
y tienen luces de freno LED en forma de L y sobre la luneta trasera hay un
spoiler trasero. Con el paquete Luxury Line el diseño del paragolpes es mucho
más limpio, con solo bordes cromados y en color de la carrocería, mientras que
el M-Sport agrega salidas de aire falsas y un pequeño difusor.
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Foto: BMW |
El Serie 2 Active Tourer se construye sobre la
plataforma UKL2 al igual que el Serie 1 (Leer artículo del 128ti) y el Serie 2 Gran Coupé (Leer artículo), así como los
Mini (Leer artículos). Las suspensiones son de tipo McPherson adelante y multibrazo atrás, con
amortiguadores adaptativos electrónicamente y dirección adaptativa opcionales.
Los frenos son de disco en las cuatro ruedas y el tamaño de los rines varía
entre 16” y 19”. Mide 4.38 m de largo, 1.82 m de ancho, 1.57 m de alto, 2.67 m
de distancia entre ejes y 17. 1 cm de altura libre al suelo, aunque puede bajar
1.5 cm si se pide la suspensión M adaptativa.
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Foto: BMW |
La versión 218i llevará el motor B38 con 3
cilindros de 1.5 litros que genera 136 hp de potencia a partir de 4400 rpm y
230 Nm de torque entre 1500 y 4000 rpm. Habrá una versión 218d con un motor
turbodiésel de 2.0 litros y 4 cilindros que entrega 150 hp a 3750 rpm y 360 Nm
a 1500 rpm.
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Foto: BMW |
El 220i Active Tourer contará con el motor B48
de 2.0 litros y 4 cilindros con 156 hp desde 4700 rpm y 240 Nm entre 1500 y
4400 rpm, pero con la ayuda de un motor eléctrico y un sistema híbrido ligero
de 48V, las cifras conjuntas suben a 171 hp y 280 Nm. La versión 223i utiliza
la misma mecánica, pero a aumenta a 218 hp y 360 Nm.
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Foto: BMW |
Todos estarán unidos a una caja de doble
embrague de 7 velocidades, pero debido a su plataforma y vocación familiar
tendrá la controvertida tracción delantera. Más adelante se revelará más
detalles sobre sus versiones híbridas enchufables, los cuales incorporarán por
primera vez la tecnología eDrive.
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Foto: BMW |
En seguridad incorpora el airbag central entre
conductor y pasajero que se ha convertido en requisito para alcanzar las 5
estrellas bajo el nuevo protocolo de Euro NCAP (Leer artículo). En cuanto a ayudas a la
conducción tendrá de serie el control crucero con función de frenado que
detiene el vehículo en giros y puede detectar peatones y ciclistas; también
tendrá cámara de reversa y asistente de reversa. Opcionalmente podrá incluir
asistente de guiado y centrado en el carril, control de crucero activo con
función Stop&Go, navegación activa, alerta de salida, cámara 360° y el BMW
Drive Recorder que memoriza los últimos 50 m para salir de la misma forma en
que entró.
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Foto: BMW |
Si bien es un vehículo de combustión
y su plataforma no permite la electrificación de momento, su interior se
inspira en el crossover eléctrico iX (Leer artículo) con el BMW Curved Display, varios lugares
de almacenamiento en la consola central, así un descansabrazo flotante con el
selector de marchas, el botón del freno de estacionamiento, aunque sin el controlador
iDrive característico de los BMW. El maletero en la versión 218i es de 470
litros y se puede ampliar hasta 1455 litros, mientras que en la 220i se pierden
alrededor de 50 litros, seguramente para dar lugar a la batería del sistema
híbrido ligero.
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Foto: BMW |
El Serie 2 Active Tourer se une a
la moda de las pantallas curvas y anchas al incorporar el BMW Curved Display que
integra el panel de instrumentos digital de 10.2” y una pantalla táctil de
10.7” con el nuevo sistema operativo BMW ID8 que también se puede controlar con
ayuda del asistente personal. Podrá incluir actualizaciones inalámbricas, sistema
de sonido Harman-Kardon, 4 puertos USB-C, cargador inalámbrico de smartphones, climatizador
automático bi-zona, asientos deportivos, tapicería en cuero Vernasca, sillas
delanteras regulables eléctricamente con soporte lumbar y masajes, volante
deportivo multifunción forrado en cuero, iluminación ambiental y techo
panorámico.
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Foto: BMW |
El BMW Serie 2 Active Tourer
estará disponible en las vitrinas europeas a partir de febrero del próximo año.
La marca bávara sigue apostando por los monovolúmenes en un mundo donde la
gente pide crossovers, aunque eso implique renunciar a su tradicional
propulsión trasera y llevar esa idea al resto de vehículos compactos. Buscará
ser una alternativa más familiar a un Serie 1 y más accesible respecto al X1 y
X2. Pero no estará solo, pues tendrá que enfrentar al Mercedes-Benz Clase B.
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Foto: BMW |
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